Páginas

lunes, 21 de febrero de 2011

El lector-río

APUNTES PARA UNA TEORÍA DEL LECTOR
LA VELOCIDAD DE LAS COSAS

LECTOR-RÍO
“Apuntes para una teoría del lector”, es una obra escrita por Rodrigo Fresán. Forma parte del libro “La velocidad de las cosas”.
Se trata de historias o cuentos, pero una definición más acertada sería la de una narración más o menos corta, que tiene como uno de sus rasgos característicos la digresión.
Este intrincado texto narrado en primera persona cuenta una historia compuesta de pequeñas historias interiores que se van presentando de forma discontinua.

Tenemos aquí dos clases de lectores:

1. El lector-escritor (protagonista del relato), al que denominamos “lector-río”, quien nos narra lo que está leyendo y a la vez es quien escribe.

2. Los demás lectores (nosotros entre ellos), a los que el protagonista define y nos presenta junto a dos tipologías: el lector poco entrenado; y lector consecuente, analítico.


El lugar ideal para esta lectura podría ser cualquier sitio que invite al recogimiento y a la reflexión, y que, en este texto, el lector reduce a una libreta en un barco que navega por las aguas de la vida: VITA-FLUMEN (la vida como río). Presenta el carácter fluyente de la existencia humana, equiparada a un río que avanza hasta fundirse en el mar, simbolizando su muerte.

En cuanto al momento de hacer la lectura, podemos decir que cualquier momento del día es bueno para esta actividad, aunque al tratar el tema del fin del mundo, el autor también parece tener predilección por el fin del día, el atardecer, acompañado de un clima benigno que le permita leer al aire libre.

Este lector-río lee respetando el balanceo de las aguas:

“Mis ojos sobre las páginas han ido adoptando una cadencia decididamente oceánica y pendular: las palabras primero se inclinan hacia un lado y después hacia otro. Ideas que caminan de proa a popa, oraciones que arrojo por babor o estribor para regocijo de albatros y tiburones”.

Lee algo que está escrito en una libreta ajena. El escritor de esa libreta (que luego fue periodista) dice “al final, me gusta visualizar el trazo de mi existencia como una fuga de A a B en constante desarrollo (…)”.

El escritor de la libreta es a su vez lector, es alguien a quien le gusta ver/leer lo que escribe. Habla de “La velocidad de las cosas”

“(…) leo líneas al azar, frases sueltas, fantasmas de vidas, intrigantes reincidencias, disparos a ciegas”

Para nosotras, la lectura determina el lugar dónde se lee.

La lectura es un acto de reflexión, de análisis sobre la creación literaria, donde las dos facetas (lector/escritor), se funden ya que el lector también es el que “construye” la obra reescribiéndola.
El lugar adecuado para deleitarnos leyendo es el que invita al ensimismamiento, el que nos permite centrarnos en la lectura y sacarle provecho, y puesto que Rodrigo Fresán dice que “el hombre no es más que un invento del agua para poder trasladarse de un sitio a otro. Estamos construidos con agua”, hemos elegido un lugar tranquilo a la orilla del río y rodeado de los Jardines del Genil: el café “Las Titas” que se encuentra en un entorno único en Granada, en la confluencia de los Paseos del Salón y de la Bomba.



Por este puente transitan aquellas vidas que van camino de convertirse en historias. Esas vidas elegidas para ser narradas atraviesan el puente con la velocidad de las cosas. Al otro lado del mismo las espera el narrador para artesanalmente modelar su historia fluvial.



“El agua es el hogar ancestral al que todos volvemos “. “ El hombre fue un invento del agua para ella poder desplazarse “. De ahí el placer que da a nuestra alma el susurro del agua al pasar junto a nosotros.



Sigamos soñando, y soñando vivamos,

y mientras vivamos soñemos.


Delia Naranjo Macías
Adoración García Linares
M. Lucrecia Ávila de Plano



2 comentarios:

  1. Hola, soy alumna de la escuela de arquitectura de málaga y estoy trabajando con este texto para realizar mi proyecto.
    La verdad, me ha costado encontrar relación entre los grados del lugar y la definición del tipo de lector con el texto, al existir varios tipos de lectores dentro del mismo relato.
    El proyecto lo estamos desarrollando en un lugar bastante peculiar, se trata de una réplica del galeón Santísima Trinidad que se encuentra permanentemente amarrado en el puerto de Málaga. Veo mucho de ese lugar en el café que por otro lado escogistéis ustedes, me parece bastante curioso.
    Todavía queda mucho trabajo pero espero que el resultado sea positivo.
    Un saludo.
    Victoria Hidalgo Villegas.

    ResponderEliminar
  2. hola soy alumno de la escuela de arquitectura de málaga y al igual que mi compañera estoy trabajando sobre el mismo proyecto con el texto de rodrigo fresán (apuntes para una teoria del lector). En mi caso también a sido un poco complicado llevar este mundo de sensaciones a la arquitectura, sobre todo por la diversidad de lectores a la que nos enfrentamos (ya que como dice el texto esta destinado a todos los tipos de lectores, a todo el mundo).
    Lo estoy intentando por medio de juego de luces y colores, uniéndolo al movimiento que se genera por si mismo en el barco (mareas, oleaje, viento etc.) Todavía sigue quedando trabajo por hacer, pero ya queda menos para la entrega!
    Un saludo.

    ResponderEliminar